Quisimos responder a esas preguntas, y más, para situarnos mejor y ver como vamos encaminando hacia una producción y un consumo de huevos más respetuoso del medioambiente y del bienestar animal.
Basándonos en fuentes de referencia del sector, parece que aún tiramos muchos huevos aptos para el consumo, y que sólo un poco más de la mitad de población en España reconoce el primer número indicado en los huevos.
También, resulta que nos preocupa especialmente el bienestar animal. Buena cosa, nuestro primer artículo, como este, trataba justamente de explicaros mejor la realidad del terreno.
Si tenéis dudas y preguntas, nos podéis escribir en los comentarios. 😉
El consumo de huevos en España según el método de producción
En 2020, el 56,1 % de los huevos envasados* vendidos en España fueron los de código 3 (en jaula). Después van los de gallinas de código 2 (suelo) con un 12,6 %, seguido de los huevos código 1 (camperos) por un 6,1 %, y los de código 0 (ecológicos) con un 1,2 %. Fuente
Por comparación, según datos de la Gencat, el consumo en Cataluña de huevos nº 1 Y 0 (considerados como sistemas alternativos..) representa un 6,2 %. Fuente: Departament d’acció climàtica, alimentació i Agenda rural
* los huevos envasados (mayormente distribuidos en supermercados o comercios de barrio) representaron un 76,8 % de las ventas en 2020, frente al 23,2 % a granel.
Conclusión:
Vemos que la producción de huevos nº 1 y 0, más respetuosa del bienestar animal y del medioambiente, tiene aún que reforzarse ampliamente.
Aquí os explicamos todo lo que necesitáis saber sobre los métodos de producción y el etiquetaje de los huevos: «Qué significan los números de los huevos»
Cabe mencionar que la producción de huevos nº 2 es la que más crece desde unos años. Seguramente el consumidor lo considerada como un punto intermedio entre una producción en jaula e industrial y los métodos más ecológicos. No obstante, os invitamos a considerar únicamente la compra de huevos 1 o 0. (Entender el porqué en el artículo mencionado arriba).
¿Qué sabemos del etiquetaje?
> El 52,2 % de los españoles relaciona el código con el sistema de producción.
> El 79,4% reconoce el nº 1, el 72,9% reconoce el nº 3, el 19,4% reconoce el nº 2, y el 35,3% reconoce el nº 0.
> El 41,5 % lo hace con la granja de la que procede el huevo.
> El 6,0% del total de encuestados identifica correctamente el significado del código impreso en los huevos = Conocen que el código hace referencia a la granja de la que procede el huevo Y al sistema de producción.
fuente: Inprovo – huevometro 2018
Conclusión:
Vemos que la gran mayoría de la gente no domina del todo el significado de todos los números inscritos en el huevo. Pero sí, parcialmente, con respecto al origen o all sistema de producción. De este último, no hay dudas que el verdadero reto es incrementar aquel 52,2%, es decir 1 de cada 2 personas no conoce el significado del primer número, y seguramente desconoce la realidad de los diferentes métodos de producción que hay detrás.
Caducidad del huevo
El 44 % de la gente afirma que si el huevo ha superado la fecha de consumo preferente, no lo usa, lo tira. el 41,1% dice que depende. fuente: Inprovo – huevometro 2018
Conclusión:
Es importante recordar que los huevos NO tienen fecha de caducidad sino de consumo preferente. Esto quiere decir que la fecha indicada en el envase no nos está indicando de tirarlos si hemos pasado esta fecha, y que, por lo tanto, su consumo posterior no representa un riesgo para la salud. Como con cualquier producto de consumo preferente, vale simplemente probar.
En el caso de los huevos, hay un truco muy sencillo que consiste en colocar el huevo en un recipiente de agua. Si flota, hay que desecharlo, si se queda al fondo, está bueno. (ver aquí un vídeo explicativo).
El bienestar animal
Según el mismo informe de Inprovo, el bienestar animal resulta ser la información más valorada por parte de los consumidores (por un 54,3 %). Además, estarían dispuestos a pagar al menos un incremento de un 10% a un 30% si le garantizaran un mayor bienestar de las gallinas.
Conclusión:
Es una muy buena señal, aunque falta que se refleje más en la realidad.
Os invitamos de nuevo a ojear el artículo: «Qué significan los números de los huevos«, que os explica en que la producción de código 1 o 0 es justamente mucho más cuidadosa del bienestar animal. En este sentido, compartimos la opinión de muchas organizaciones y de la propia Unión Europea de que hemos de salir poco a poco de la producción de código 3.
Entre los jóvenes y los mayores
> A medida que aumenta la edad, es más determinante la frescura.
> Sin embargo, para los más jóvenes tiene mayor importancia el precio.
fuente: Inprovo – huevometro 2018
Conclusión:
Es importante no dejarse engañar por el supuesto gran frescor del huevo, tal como está habitualmente indicado en los envases. Un huevo realmente fresco está recién puesto. Se reconoce fácilmente, ya que la clara tiene cierta consistencia y se «aguanta» alrededor de la yema. Son los huevos que buscaremos para hacer «huevos pochés» por ejemplo. Pasados unos días, el huevo no es tan fresco y se nota como la clara se vuelve más líquida. No obstante, está perfectamente consumible y no hay riesgo hasta que realmente se pongo malo (muchos más días después de la fecha indicada en el envase – ver arriba: caducidad del huevo).
Tema precio, os invitamos a mirar la comparación en nuestro artículo ya mencionado. Veréis que comprar huevos nº 1 no representa un sobrecoste importante y os garantiza un bienestar animal muchísimo mejor con respecto a los huevos nº 2 o 3.
Gran confianza por parte del consumidor
La información que se encuentra en el envase sobre calidad y seguridad de productos alimentarios es en la que más se confía (el 81,8%), seguido de la información proporcionada por profesionales de la salud (81,5%), por asociaciones de consumidores (75,4%) y punto de venta/comercio (71,2%). fuente: Inprovo – huevometro 2018
Conclusión:
Ojo con el marketing de los envases que nos puede fácilmente engañar. Imágenes de granjas o de gallinas bonitas, textos que destacan la frescura, etc., no corresponden a la realidad de la producción, mayormente industrial (nº 2 y 3). Recordamos que la producción de huevos nº 0 (ecológico) o nº 1 (de pagès) solo representa un 6,2% aquí en Cataluña.